LA GITANA

LA GITANA

a mi frente una enorme y colorida pollera,

cubriendo los pies, se zarandeaba quebrando

las estrechas y bellas femeninas caderas e

un largo renegrido cabello, de pies descalzos,

hoya de cobre en mano, pulseras en los brazos

y al girar su cabeza, a los lados, grandes aros lleva,

brillantes dorados colgando de sus orejas.

como una sensacional estrella del escenario

llenaba, totalmente con su andar la vereda

su gracia, su donaire, que está metido en sus genes

llama la atención hasta a sus iguales, las mujeres

Preguntándose:

De donde sacó esa gracia la gitana Dolores

Con su turbante florido y su sonrisa de oro?

- “ te adivino la suerte lindo?

Déjame ver la palma así te digo tu futuro destino

Que en las líneas de tu mano está escrito. “-

No vi su mano ni oí lo que me decía sonriendo

vi coloridos collares en su cuello moreno,

su blusa multicolor dejaba insinuar sus senos

la nariz aguileña y sus bellos ojos verdes…

como negarle mi mano a ese ejemplar moreno.

lleva una rumba en el zarandear del cuerpo,

en los dedos de sus manos el repiquetear de Triana

un eterno destino de violines, oro, cobre

guitarras, acordeones, lamentos flamencos, celos

de su tribu - que nunca le permitirá otro amor-

a no ser el que desde niña le destino su pueblo.

que navega sin anclas, libre, por el mundo entero

Lille